27 oct 2008



1 comentario:

Anónimo dijo...

Asé es el amor. Nos sentimos vacios sin el amado, nada nos vale. La separación resulta terribel, y nada nos vale. Bien reflajado, con mucho sentimiento. Y la frase final: Ya no hay manantial del que yo pueda beber, si no es tu boca. Me ha encantado.

Un saludo,


Pedro.